Llego marzo, con eso el inicio para muchos de un nuevo ciclo educacional o laboral según el caso y a se vez, para muchos de ellos, ese periodo de preguntarse si es o no el momento de “cambiar el tarro”, “renovar el compañero”, comprar un nuevo computador. Ante esta situación, considerando además nuestra naturaleza, buscaremos el computador portátil que nos permita de mejor manera compatibilizar una maquina de trabajo que nos permita relajarnos de rato a rato con nuestros juegos favoritos y tenga las características para correrlo lo más decentemente posible.
ASUS nos presenta una opción que mezcla eso con un diseño sobrio y elegante, el Zenbook 3 no solo tiene características impecables a la hora de hablar de ultrabook, sino que además cumple con lo que se le exige a un computador que se vanaglorie de ser “ultra” con11,9 milímetros de grosor y 910 gramos de peso…que salvo me equivoque no lo hace propiamente ni el más delgado ni el más liviano pero va cerca. Para su funcionamiento contamos con un procesador Intel I7 séptima generación de 2,7 GHz, 16GB LPDDR3 de RAM con 2133 MHz, disco duro de 1 TB SSD con una serie de características más que incluyen un sistema de sonido de 4 parlantes con 5 magnetos que nos prometen ser asombroso y despampanante.
El Zenbook 3 promete ser un compañero fiel no solo para trabajar de oficina a casa pero para todos los trayectos que queramos hacer en el camino también, con una vida util de la batería que deberá llegar hasta las 9 horas continuas de trabajo, siendo un tiempo bastante aceptable, y con el compromiso por la marca que es posible cargar un 60% de su capacidad en solo 49 minutos (pero no dicen bajo que condiciones).
Lo unico que preocupa es su precio, de 1.499.990, que por mucho que digamos que incluye un bolso propio de transporte y un Mini Dock para conectar puertos adicionales como USB y HDMI que no trae de forma propia por su condición de ultrabook parece un poco alto, pero si comparamos el precio con otros ultrabook de alta gama y consideramos las características del computador de cierta manera tendemos a justificar, además de la elegancia y sobriedad del diseño que también tiene un valor agregado en el costo del lujo y exclusividad.