La primera novela gráfica de R.J Palacio llega a nuestro país gracias a Penguin Random House, una historia que promete no dejar a nadie indiferente y que cumple con creces.
Fueron tiempos muy oscuros, sí… pero lo que más recuerdo de ellos no es la oscuridad, sino la luz
Esta reseña podría resumirse en cinco palabras. Todos deberían leer esta historia. Sea como un regalo o como una lectura de colegio, los libros de R. J. Palacio poseen la clase de mensaje que nos enseña lo que es ser humano en escenarios donde lo bueno y lo malo se entremezclan, tal y como la vida es.
Pájaro blanco se inserta en el mundo de Wonder, novela de R. J. Palacio que fue adaptada al cine en 2017; pero este libro se puede leer de forma independiente, por lo que no es obligatorio leer antes los otros trabajos de la autora para entenderla.
Así, en este libro, Palacio nos lleva a través del relato de Sara, una mujer que le está contando su historia a su nieto y que nos lleva a la época de la Segunda Guerra Mundial, donde ella tuvo que esconderse para no ser capturada por los nazis que invadieron su pequeño pueblo en Francia, contando con la ayuda de un compañero de colegio que le da refugio.
De esta forma, tenemos dos grandes personajes. Sara, esta niña que en principio tenía una vida normal pero que se ve forzada a madurar de forma muy rápida y entender lo que la pérdida significa; y a Julien, un muchacho que constantemente es atacado en el colegio por un defecto en sus piernas, producto del polio que le afectó cuando era niño, pese a ello sigue viendo lo bueno en la vida con un gran corazón. Si bien hay otros personajes, éstos son los más importante y a quienes veremos con mayor frecuencia a lo largo de la historia.
Ambos se encuentran muy bien definidos y la relación que se va dando entre ellos nos permite ver toda clase de sentimientos, a nivel de diálogo y también destacando la forma en que la autora consigue reflejar las emociones del momento que describe en las expresiones del cuerpo y del rostro de estos dos personajes.
La forma en que la historia se va desarrollando es bastante sencilla, logrando avanzar lo suficiente en cada página para mantenernos con el libro en la mano. Los hechos se suceden uno tras otros, incluso cuando los meses van pasando, esto hace que sea una lectura bastante rápida, pese a lo mucho que manifiesta.
Ahora bien, en términos de ilustración, cada una de las viñetas están bien hechas, en ningún momento se siente excesivo, por el contrario, las ilustraciones se transforman en un símil de los diálogos más que en un complemento, precisamente por la forma en que todo se expresa. Asimismo, al entrelazarse con metáforas -especialmente con aquella que le da el nombre al libro- éstas tienen una manera más directa de llegar al lector, lo que al final se ve reforzada al incorporar un glosario y una nota que explique parte de lo que hemos leído.
A pesar de que usar el racconto como recurso para contar una historia del pasado es bastante común, en Pájaro Blanco no hay otra forma de ir hacia atrás y ver lo que Sara tuvo que vivir, y que además funciona muy bien con el nexo hacia la actualidad, que con toda certeza es una de las principales intenciones en esta historia.
Pueden olvidarse muchas cosas en la vida, pero la bondad nunca se olvida. Como el amor, se queda contigo… para siempre
Pájaro blanco es una novela grafica que logra evocar el cariño, la tristeza y la esperanza en quien se encuentre leyendo. Una historia que nos recuerda la importancia de mirar hacia el pasado y rescatar mensajes atingentes a nuestra época, reafirmándonos que aún hay injusticias a nuestro alrededor y que todos tenemos el poder de detenerlas.