Hay que darle crédito a las distribuidoras a veces, cuando le achuntan con la fecha para una película… sí que le achuntan. Fresquita de obtener 10 nominaciones a los más recientes premios de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas, “La Favorita”, la última película del griego Yorgos Lanthimos llega a las salas nacionales y vaya que hay harto de que hablar con esta película.
Si hay una película dentro de las nominadas que merece tanto reconocimiento, es esta. “La Favorita” es de esas películas que irradia personalidad y estilo en cada plano. Para aquellos que no son familiares con el estilo de Yorgos, el griego no es de esos directores que te van a hacer una película tradicional. Su filmografía está llena de humor negro, dialogo incómodo, precisión y planos que parecen sacados directamente de una película de Stanley Kubrick. Es más, me atrevería a decir que es lo más cercano que tenemos a ese mítico director en la actualidad, y esta es su “Barry Lyndon”.
La película, en su forma más básica, se podría resumir como un juego de dominancia entre tres poderosas mujeres, cada una tratando de manipular, arruinar y humillar a sus “oponentes”. Es un guion cargado de sexualidad, traición, sátira y humor, todo esto bajo el contexto de la monarquía británica del siglo XVIII. Entre Olivia Colman, Rachel Weisz y Emma Stone, todas se comen la pantalla. El trío protagonista es un agrado de ver, tanto Weisz como Stone tienen roles tan activos en la historia que siempre te preguntas “cuál será su siguiente movida”. Y no podemos dejar de lado a Olivia Colman que da una performance tan convincente, que a días de verla no me he podido sacar su personaje de la cabeza.
El otro gran aspecto de esta película para mi es su fotografía. La película usa iluminación natural de ventanas, velas y días nublados, la cual sumado a la atrevida elección de lentes de Lanthimos y su director de fotografía Robbie Ryan, hacen que “La Favorita” tenga uno de los looks más únicos que haya visto en cines en mucho tiempo. Incluso cuando a veces es verdad que los lentes de más bajo milimetraje, los llamados “ojo de pez”, pueden distraer un poco y que su uso se siente injustificado en un par de ocasiones.
Creo que esta es la película que termina por confirmar absolutamente que Yorgos Lanthimos es un maestro en lo que hace. Al igual que los mejores directores, hace que todo parezca tan sencillo y simple, pero ni me imagino lo que debe haber sido llevar a cabo esta visión. Te gusten sus películas o no, tiene un sello tan distintivo que es imposible confundirse cuando vez una película de él. “La Favorita” es la clase de película donde todas las piezas encajan perfectamente en su lugar y la estaré apoyando hasta el final durante esta temporada de premios.
La única razón por la que (por ahora) no entra en mi top 20 del año, es que aunque mentalmente amaba todo lo que estaba pasando, me dejó un poco frío emocionalmente. Al igual que otras películas de Yorgos es una experiencia súper cerebral pero, a diferencia de sus anteriores trabajos especialmente “The Killing of a Sacred Deer”, no sentí una conexión tan potente con esta película. Analíticamente disfrutaba de la secuencia de eventos y personajes, pero una vez que llegamos al final no pude evitar sentirme un poco frío tras la experiencia. Y como pequeña queja mínima, me gustó mucho la música pero hay un tema en particular que repiten tanto que perdió todo su efecto para la última vez que lo utilizaron.
Sin duda “La Favorita” es una de las obras más personales de 2018 y que aunque no conecté tanto con ella a final de cuentas, sí debo reconocer que es una visión plenamente realizada y que a diferencia de muchas de las películas nominadas, es un agrado y una hilarante experiencia en el cine. Totalmente recomendada. Ubicaré a “La Favorita” en el lugar número 21 de las 138 películas de 2018 que he visto, arriba de “A Star is Born” y debajo de “Hereditary”.